


Los prelibros vienen dentro de una pequeña caja de madera similar a la que tienen los niños para guardar los juguetes. Es fácil de transportar y de almacenar. Además si se le da la vuelta se puede utilizar como mesa para que el niño pueda colocar el libro y estar más cómodo. Dentro también encontramos una mantita creada con trozos de telas de las culturas tratadas para construir un espacio donde el niño esté rodeado de estímulos culturales.